Cuando se desencaden\363 la feroz persecuci\363n contra el pueblo armenio, en 1915, Armenuhi ten\355a un a\361o y medio y viv\355a con su familia en el pueblo de Aintab, por entonces parte del Imperio Otomano. Como muchos de sus compatriotas, viaj\363 oculta en alforjas cuando, en su huida, los padres cruzaron a pie el desierto Der Zor, sin alimentos ni agua. Tres a\361os despu\351s regresaron, pero el sue\361o dur\363 poco. Esta vez, para salvarse debieron arrojarse de un tren en movimiento que los llevaba a un destino siniestro donde los armenios mor\355an extenuados, calcinados por el sol, o vejados a manos de los soldados otomanos. Apenas adolescente, Armenuhi (que significa "mujer armenia") fue enviada a Buenos Aires para casarse con Yervant, un hombre que doblaba su edad y a quien jam\341s hab\355a visto. Con \351l convivi\363 cincuenta a\361os, y juntos fundaron una familia que se hizo enorme y permanece hasta hoy entrelazada. Incansable, Armenuhi transit\363 durante a\361os los pasillos de consulados, embajadas y la Cruz Roja para traer a sus padres y sus hermanos desde Oriente medio y ayudar a su hermana a salir de la Armenia sovi\351tica. Hurgando en recuerdos propios y familiares, Magda Tagtachian reconstruye en Nomeolvides Armenuhi la vida de una mujer que sobrevivi\363 al genocidio de su pueblo y que, con amor y determinaci\363n, dedic\363 su vida a proteger y guiar a cada uno de los suyos.