A veinte a\361os de la llegada de los cultivos gen\351ticamente modificados al pa\355s, el sector de los agroqu\355micos que se utilizan para producir aquello que comemos y vestimos creci\363 casi un mil por ciento. \277De d\363nde viene la idea de que se puede producir alimentos con la ayuda de venenos, as\355 se ingieran en peque\361as dosis cotidianas, sin que nada suceda? \277Cu\341les son las consecuencias en el largo plazo, en las personas y en el medio ambiente? \277Qui\351nes est\341n tan interesados en que sigamos creyendo que es la \372nica manera de que comamos todos? \277Cu\341l es el lado oscuro del negocio de los agroqu\355micos, ese que s\363lo en nuestro pa\355s mueve cerca de tres mil millones de d\363lares al a\361o, mientras doce millones de argentinos sometidos a las fumigaciones pagan con su salud y muchas veces con su propia vida?\012\012La periodista Fernanda S\341ndez explor\363 esas preguntas y logr\363 una investigaci\363n profunda, rigurosa y estremecedora. Viaj\363 a los pueblos fumigados de la Argentina: aquellos de Entre R\355os, Santa Fe, Chaco, C\363rdoba y tantas otras provincias agr\355colas en donde los problemas de fertilidad, las malformaciones y las enfermedades arrasan. El vendaval qu\355mico no respeta casas, arroyos, quintas ni escuelas. S\341ndez escuch\363 sus historias, comparti\363 sus temores. Tuvo acceso a la trastienda del agronegocio y comprob\363 que en nuestro pa\355s se siguen utilizando productos prohibidos desde hace a\361os en otros lugares del mundo. Habl\363 con redes de vecinos y con m\351dicos, con investigadores y con cient\355ficos. Y todo lo cuenta de manera magistral. E inquietante.\012\012La Argentina fumigada analiza, como nunca antes, un negocio millonario que encierra un experimento a cielo abierto del cual, nos demos cuenta o no, m\341s tarde o m\341s temprano todos somos v\355ctimas.