En No soy un serial killer, vimos c\363mo John Cleaver romp\355a todas las reglas para salvar a su ciudad del mal. En No soy el Se\361or Monstruo, nos quedamos sin aliento mientras peleaba con su monstruo interno, en un intento de seguir al mando de su vida. Ahora, John maneja a la perfecci\363n sus talentos oscuros y asumi\363 su rol como asesino de asesinos. Es hora de librar otras batallas. Solo existe una certeza: la muerte est\341 muy pero muy cerca\277 Mucho m\341s de lo que John imagina.