El amor no tiene f\363rmulas. Sucede o no sucede. Hay mil maneras de amar y al mismo tiempo una sola. Sobre el amor no sabemos nada y, sin embargo, nos dejamos seducir una y otra vez por sus artima\361as. Con la ingenuidad del primer encuentro encaramos el \372ltimo, no nos resignamos. Perdemos, renunciamos, decimos que nunca m\341s, que para siempre, y volvemos a enamorarnos.\012\012Los cuentos breves e intensos de Bel\351n Wedeltoft nos invitan a recorrer el amor por sus tormentosos laberintos. Algunos con humor, otros con amarga iron\355a o falso desapego, narran la felicidad de los encuentros y la infelicidad de los desencuentros como si fueran ardides de un malabarista demencial que nos maneja a su antojo. Atravesados por el soliloquio descarnado de alguien que se despide para siempre del amado y lo entierra en su coraz\363n, estos relatos no tienen consuelo ni esperanza. No sabremos mucho m\341s del amor cuando terminemos de leer este libro inquietante, pero nos sentiremos, tal vez, un poco menos solos o un poco menos tontos. Apenas un poco.